Este anuncio reactivo de Renault reduce el precio de los coches eléctricos cuando aumenta la polución

Renault ha instalado recientemente en Bucarest (Rumanía) una valla publicitaria que reduce el precio de los coches eléctricos de la marca francesa cuando los niveles de polución se disparan.

El futuro de la automoción viajará de manera impepinable a bordo de los coches eléctricos, los únicos capaces de poner coto a los insoportables niveles de polución que brotan de los tubos de escape de los automóviles pertrechados de motor de combustión.

Por eso, y para convencer a los ciudadanos de otorgar su voto de confianza a los vehículos eléctricos (habitualmente más onerosos que los tradicionales coches con motor de combustión), Renault ha lanzado una ingeniosa campaña en Rumanía.

El eje central de esta campaña es una valla publicitaria de naturaleza “responsive” que reduce el precio del automóvil eléctrico Renault Zoe cuando los niveles de contaminación se disparan.

Bautizada con el nombre de “DisCO2unt Billboard” tan singular valla publicidad fue emplazada en Bucarest, que de acuerdo con el índice TomTom Traffic Index, es una las ciudades más contaminadas de Europa y también una de las urbes más congestionadas del viejo continente.

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Con tan inusitada campaña, alumbrada por Publicis Rumanía y lanzada el pasado el mes de abril, Renault trata deliberadamente de conectar con todos aquellos rumanos que están postergando la compra de un vehículo eléctrico parapetándose detrás del precio a modo de excusa.

La valla de Renault estaba conectada a sensores de polución ubicados en áreas con mucho tráfico en la capital rumana. Y un algoritmo creado ad hoc se tomó la molestia de generar automáticamente descuentos aplicados al precio real del Renault Zoe que estuvieran alineados con los actuales niveles de contaminación de la metrópoli.

Cuanto más se desbocaban los ratios de polución, más de reducía el precio del nuevo Renault Zoe. Los cambios cambiaban en realidad cada seis minutos y para beneficiarse de los descuentos de los que se hacía eco la valla los interesados debían simplemente tomar un foto y dirigirse al concesionario más cercano para formalizar la compra.

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